lunes, 16 de septiembre de 2013

Supervirus

CRÓNICA ONÍRICA DEL SIGLO XXI
                     Supervirus
                                        Francisco Chaves Guzmán

            En 2087 se dio a conocer un descubrimiento que los globalizadores esperaban llegase a cambiar el curso de la Historia. Según el ministerio de Educación y Propaganda, un grupo de científicos de la Universidad Central había logrado detectar el virus causante de la desafección política, lo que auguraba un futuro muy halagüeño, en el que la paz y la cohesión social reinarían por fin sobre la faz de la tierra.

            El llamado Supervirus Rebelde era el responsable de la desconexión de ciertas cadenas de aminoácidos, precisamente las encargadas de mantener en las estructuras cerebrales humanas la natural sumisión y la necesaria docilidad. La aparición del supervirus convertía a los portadores en fieras indisciplinadas, insolidarias e indignas, provocando un estado cercano a la barbarie e incitando al odio y a la hostilidad.

            Pero había más: el Supervirus Rebelde, al tiempo que producía tales efectos morales, desencadenaba también una serie de dramáticas secuelas físicas que alteraban las defensas del organismo, cuyo resultado era una muerte dolorosa e inmediata. Los científicos de la Universidad Central, por otra parte, aseguraban que la enfermedad era altamente contagiosa, hasta el extremo de resultar muy peligroso el hecho de compartir una sombra en el parque. Se reclamaba a todos los habitantes del planeta que delatasen a cualquier sospechoso de portar desafección política.

              Un investigador incauto tuvo la malhadada idea de exponer públicamente sus dudas sobre la existencia de tal enfermedad. La consecuencia fue que apareció muerto varios días después con todos los síntomas previstos. Hoy, tras una autopsia de sus restos, sabemos que la muerte le sobrevino por un envenenamiento con arsénico.

            En resumen, que los globalizadores creyeron haber encontrado la panacea de todos sus problemas, pues al fin tenían un culpable. Pero desde los reideros clandestinos se lanzó una gran campaña de información con un mensaje claro y directo: “El Auténtico Supervirus Es El Gobierno Global”.  

         Ciudad H7Q22       Enero de 2101 

Publicado en Diario Lanza el 16 de Septiembre de 2013 

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