lunes, 21 de enero de 2013

Ganímedes

CRÓNICA ONÍRICA DEL SIGLO XXI

                              Ganímedes
                                                          Francisco Chaves Guzmán

     En 2053, puesto que las medidas con que intentaban atemorizar a las gentes fueron generadoras más de chanza que de pánico, el ministro de Asuntos Internos, ensanchando tal vez los límites de su responsabilidad, se sacó de la manga un enemigo externo, una amenaza total y definitiva que debería sumir a todos en el terror.

     Lo del enemigo externo es algo suficientemente conocido a través de la Historia, al que han echado mano gobernantes de todas las razas y de todas las épocas. Pero el que inventó el señor ministro el año 2053 añadía la cualidad de exótico a la categoría de externo, lo que congratuló mucho a sus parientes más cercanos, que le hicieron llegar infinidad de correos electrónicos alabando su imaginación y lucidez.

     Los telediarios de los cinco continentes abrieron un lunes de abril con la estremecedora noticia de que el Gobierno de Ganímedes, el satélite jupiterino, había declarado la guerra al planeta Tierra y amenazado con la destrucción total si no se rendía sin condiciones. El plazo era de quince meses, tiempo que sus naves interestelares tardarían en recorrer la enorme distancia que nos separaba. (Sabido es que, según la psicología conductista, el castigo diferido es mucho más efectivo que el inmediato).

     Era necesario, pues, ponerse rápidamente a trabajar en defensa de nuestra civilización para no perder la condición de seres humanos libres y trascendentes. Para lo cual se organizaron multitudinarias y espontáneas manifestaciones en apoyo al Gobierno Global, al Credo Global y a la Policía Global. Para que esos despiadados enemigos, cuyo objetivo era esclavizarnos, supiesen que se enfrentaban a un planeta unido y sin fisuras.

     Lo que nadie supo valorar en el ministerio de Asuntos Internos, ni en ningún otro ministerio del Gobierno Global, fue que la amenaza externa llevaba aparejada otra noticia de inusitada importancia, pues por primera vez se conocía la existencia de vida más allá de la atmósfera terrestre. Pero tal cosa caía en la órbita de la ciencia, y en ese campo las hipótesis carecen de valor a falta de verificaciones.

Ciudad H7Q22
Enero de 2101

Publicado en Diario Lanza el 21 de Enero de 2013

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