lunes, 24 de diciembre de 2012

Abrevaderos

CRÓNICA ONÍRICA DEL SIGLO XXI

                Abrevaderos
                                           Francisco Chaves Guzmán

     Fue en 2049 cuando cerró sus puertas el último Bar. Como consecuencia de una decisión política tomada mucho tiempo atrás, incluso antes de la implantación del régimen de los globalizadores o mercachifles.

     Hacía ya quince o veinte años que la normativa que regulaba el negocio de la hostelería había incluido un nuevo tipo de establecimiento, junto a los tradicionales Cafés, Bares o Mesones: el Abrevadero. Que poco a poco ganó la partida al resto. Eso sí, con la planificación, la propaganda y la ayuda del Gobierno Global.

      Como ya saben ustedes, que los han tenido que sufrir hasta hace muy pocos meses, los Abrevaderos eran sitios pensados para cubrir exclusivamente las necesidades de hambre y sed de sus clientes. Donde la decoración, el trato y la música ambiental eran cortantes como una falsa sonrisa y gélidos como un exabrupto.

     Lo que quizá no sepan es que su nombre no fue producto de la casualidad, sino que estaba ligado al concepto que los gobernantes tenían de los súbditos. Y quizá tampoco sepan que guardaban en sí mismos un objetivo de gran trascendencia política: acabar para siempre con el Bar como Ágora, como sitio de encuentro, como lugar de intercambio de pareceres, como aula abierta de conocimientos insólitos, como catalizador de amistades fortuitas, como refugio contra la soledad, como templo de la alegría.

      Y para salvar a los mentados súbditos de los extraordinarios peligros que tales actividades escondían, que debían ser muchos, el Gobierno Global y sus aliados decidieron inventar el Abrevadero, al que únicamente se iba a comer y beber. Donde tantas trabas se inventaron para dificultar, y hasta prohibir, la inmensa mayoría de las relaciones sociales, ¿cómo iba a permitirse un lugar tan insano, promiscuo y subversivo?

     Pero todo este disparate tuvo un efecto provechoso: en los reideros clandestinos se comenzó a compartir la ciencia y la literatura con vino tinto y taquitos de jamón. Y desde los reideros nos han devuelto ahora el Bar, a la caída del régimen de los mercachifles.

Ciudad H7Q22
Enero de 2101

Publicado en Diario lanza el 24 de Diciembre de 2012

lunes, 17 de diciembre de 2012

Sicarios

CRÓNICA ONÍRICA DEL SIGLO XXI

                   Sicarios
                                         Francisco Chaves Guzmán

     En el transcurso de 2048 el Gobierno Global inició, y culminó, un tortuoso camino que tenía como objetivo dificultar aún más la comunicación entre los súbditos, pues el miedo a la desafección, y hasta de la subversión, llenaba de sombras fantasmagóricas los pulidos pasillos de todos los Ministerios.

     Para ello diseñó una planificación con ribetes kafkianos que constituyó un modelo de lo que en otras épocas se llamaba ingeniería social. No es este el único ejemplo de tal disciplina sociológica, pero sí uno que por su sencillez y eficacia se estudiará en el futuro como una de las cumbres manipuladoras del régimen de los mercachifles.

     La primera acción consistió en el encargo a una legión de sicarios de organizar constantes algaradas de ruido, hasta que el estruendo alcanzase tal magnitud que todas las labores humanas quedasen afectadas. En pocos días trabajar y descansar se convirtieron en un infernal tormento que arrasó los cinco continentes.

     La segunda parte de la maquinación se basó en el trabajo de otro grupo de esbirros, cuyo cometido fue sembrar el descontento en todas las ciudades, incitando a sus moradores a la protesta contra la ola de bullicio ensordecedor. Se da la circunstancia de que la forma elegida por los habitantes del planeta para mostrar su enfado consistió en una cacerolada universal, con lo que aquello se convirtió en una jaula de grillos.

     Y ahí intervino, en un corolario estremecedor, como mediador y garante de la paz, el Gobierno Global. Que achacó el alboroto a las conversaciones que todos los habitantes mantenían de forma indiscriminada y prestando oídos sordos a las leyes que las regulaban.

     Habrán ustedes certeramente imaginado que esas leyes fueron sabiamente modificadas, haciéndolas mucho más restrictivas, y que el Ministerio de Sanidad Global emitió una comunicado sobre los males físicos y morales producidos por tanto hablar y hablar y hablar entre personas no autorizadas. Por supuesto, sicarios y esbirros fueron felicitados y recompensados antes de asignarles una nueva tarea.

Ciudad H7Q22
Enero de 2101

Publicado en Diario lanza el 17 de Diciembre de 2012

lunes, 10 de diciembre de 2012

Absolutismo

CRÓNICA ONÍRICA DEL SIGLO XXI

                   Absolutismo
                                             Francisco Chaves Guzmán

     En 2047, para compensar de alguna manera el fracaso de las dictaduras de los megalómanos, la seguridad jurídica de los habitantes del planeta cayó en las cloacas. Ya desde los albores del Gobierno Global los poderes habían sido también globalizados y, por lo tanto, su división teórica no se correspondía con la realidad concreta.

     Anulada la autonomía del poder judicial, el segundo escalón en la pérdida de los derechos de los súbditos fue la ambigüedad de las disposiciones legales. Pues los legisladores basaban su valía en lo que ellos creían ser pruebas de agudo ingenio, pero que realmente consistían en laberintos ideológicos y juegos de significados que dejaban la interpretación de las leyes al socaire del humor de los cabalistas. Y esto no tenía nada que ver con la secular costumbre de habilitar normas con que saltarse las normas, que tanto auxilio histórico prestó a los desaforados, sino con la entronización del galimatías como elemento de juicio.

     Un tercer escalón en la bajada a los infiernos legales estuvo constituido por los continuos vaivenes de criterio con respecto a la licitud o ilicitud de las conductas, por lo que los súbditos comenzaron a no saber si sus actos merecían un diploma o una mazmorra. Y a la recién estrenada costumbre de introducir cambios normativos a petición de grupos de presión previamente canalizados en sus demandas, lo que permitía otorgar a las maniobras una envoltura democrática y popular.

     Pero la caída en las cloacas se produjo, como decía al principio de esta crónica, en el año 2047, cuando a la policía global se la facultó para dictar sentencias e imponer condenas. Quedando los jueces relegados a una labor meramente administrativa, consistente en levantar acta de los veredictos.

     Quiero dejar constancia de que en los reideros clandestinos sonó, en contra de lo que podría pensarse, una gran carcajada, pues, en ellos, los científicos sociales ya habían vaticinado con exactitud cronológica la nueva deriva absolutista.

Ciudad H7Q22
Enero de 2101

Publicado en Diario Lanza el 10 de Diciembre de 2012

lunes, 3 de diciembre de 2012

Defenestrados

CRÓNICA ONÍRICA DEL SIGLO XXI

                   Defenestrados
                                           Francisco Chaves Guzmán

     A finales de 2046 cayeron los primeros caudillos megalómanos, a quienes pronto siguieron la totalidad de sus colegas. Sus oníricos imperios eternos sólo habían durado el tiempo justo para que desde el Gobierno Global se comprendiese que, en lugar de servir a la solución de viejos problemas, se dedicaron a crear otros nuevos.

     Su desgracia estuvo propiciada por la creencia que tuvieron en que el poder que se les había otorgado era de su propiedad y no un simple usufructo que se les concedía en pago por los servicios prestados. Es más, ellos nunca hubiesen sospechado que el Gobierno Global tampoco era propietario del poder que ejercía, sino usurpador por medio de falacias y manipulaciones.

     Así pues, los megalómanos, cegados por su distorsionado análisis de las vicisitudes históricas, embebidos por la idolatría de sí mismos, seguros de que su misión estaba sancionada por conjunciones galácticas, se dieron al pillaje y la crueldad. Y tardaron poco en plantar cara a sus valedores, creyendo tener consigo a los pueblos que sojuzgaban.

     El Gobierno Global tampoco tardó mucho en dictar su sentencia. Diestro como fue siempre en maniobrar desde las sombras, multiplicó el descontento, enfrentó entre sí a los dictadores, apoyó a los disidentes locales y prometió el paraíso en la tierra. Para terminar defenestrándolos y entregando sus cabezas a las facciones más fanáticas y exaltadas, que las arrastraron en las plazas públicas para solaz de las muchedumbres. El ministro global de Asuntos Internos aplaudió a los pueblos que se habían librado de la tiranía, omitiendo, eso sí, que era él quien contrató a los tiranos.

     Y, entretanto, los habitantes del planeta miraban atónitos las pantallas de televisión, sin comprender nada de lo que estaba pasando, haciendo conjuros esotéricos para librarse de la desgracia y voluntariamente olvidados de que ellos eran los legítimos custodios del poder que los usurpadores detentaban.

Ciudad H7Q22
Enero de 2101

Publicado en Diario Lanza el 3 de Diciembre de 2012