lunes, 26 de noviembre de 2012

Megalomanía

CRÓNICA ONÍRICA DEL SIGLO XXI

                  Megalomanía
                                            Francisco Chaves Guzmán

     Durante la primavera de 2045, tras los estruendosos fracasos que supusieron las prohibiciones de respirar y pensar, los ideólogos del Gobierno Global descubrieron algo que llevaba descubierto cientos de años: la megalomanía. Decididos a terminar con la falta de entusiasmo en algunas provincias y protectorados, una vez consultados los asesores duchos en análisis histórico e histriónico, concluyeron que la utilización de ciertas personas con ínfulas mesiánicas se derivaría en inmensos beneficios para el orden social. Con lo que se dio luz verde al neocaudillismo megalómano.

     El nuevo sistema de control fue presentado como un avance sustancial en el difícil camino hacia la democracia global, que acabaría de una vez por todas con la insumisión mental, las dudas sistemáticas y el individualismo insolidario.

     Con tal fin se diseñó un dispositivo capaz de localizar individuos con una serie de características mentales idóneas para la misión que se les encomendaría. Con un buen nivel de formación, pero no demasiado cultas. Más intuitivas que inteligentes. Capaces de hablar de grandes ideales, pero anteponiendo siempre su narcisismo. Convencidos de haber sido tocados por fuerzas telúricas y cósmicas para salvar el planeta de la abominación. Teatrales, ególatras, intolerantes, puritanos y estoicos.

     Así nació la casta de los nuevos dictadores, convencidos de que se habían hecho a sí mismos, seguros de su poder sobre los montes, los valles y las personas. Dispuestos a ocupar un sitio clave en la historia de la humanidad y conseguir por primera vez un imperio que durase mil años. Rodeados de sublimes rituales, de ofrendas de flores, de cánticos corales, de sumisos criados y de cámaras de televisión.

     Zambullidos en su megalomanía no fueron capaces de advertir que su aparente poder omnímodo dependía de unos hilos manejados desde fuera, que eran simples marionetas bailando la danza del inminente desastre.

Ciudad H7Q22
Enero de 2101

Publicado en Diario Lanza el 26 de Noviembre de 2012

lunes, 19 de noviembre de 2012

Suicidios

CRÓNICA ONÍRICA DEL SIGLO XXI

                      Suicidios
                                            Francisco Chaves Guzmán

     El año 2044 estuvo marcado por el suicidio del ministro de Asuntos Prohibidos, el que tanto había luchado por acabar con la funesta manía de pensar, que se había llevado por delante a su mujer, sus cuatro hijos, el chofer, la cocinera y el jardinero. Dejó una carta en la que admitía ser responsable de todas estas muertes, en la que confesaba no haber tenido suficiente presencia de ánimo al descubrir que él mismo mantenía el abominable vicio de pensar y haberlo detectado también en los familiares y criados.

     Su muerte vino seguida de una interminable plaga de suicidios protagonizada por gente incapaz de armonizar su naturaleza pensante con el respeto que le suscitaba toda norma emanada de los dirigentes. Cabe deducir que la inmensa mayoría de la población no cayó en ese afán autodestructivo gracias a la incapacidad de que habían hecho gala los responsables del Ministerio a la hora de definir el término “pensar”.

     El ministro fue despedido entre floridas loas a su insobornable dedicación a los principios que profesaba, el sentimiento de solidaridad que animaba cuantas acciones emprendía, la infatigable abnegación al prohibir lo que se le pusiese a mano y el espíritu de sacrificio que iluminó sus pasos cada día y a toda hora.

     Con respecto al común de los suicidas que le acompañaron en la autoinmolación, las cadenas de televisión que la cúpula del Credo Global tenía en todos los puntos del planeta se encargaron de atribuir su muerte a la pérdida de valores tradicionales, al pertinaz materialismo que arrasaba sublimes esencias y a la cada vez más evidente falta de respeto a la naturaleza humana, sagrada e inviolable.

     Lo que a nadie se le ocurrió decir es que el ministro de Asuntos Prohibidos había caído en las redes de la tela de araña legal que él mismo contribuyó a crear. Y que su escasa formación intelectual le impidió enfrentarse a su propia bestia, al monstruo que lo devoraría con una dentellada asesina.

Ciudad H7Q22
Enero de 2101

Publicado en Diario Lanza el 19 de Noviembre de 2012

lunes, 12 de noviembre de 2012

Desfachatez

CRÓNICA ONÍRICA DEL SIGLO XXI

                     Desfachatez
                                               Francisco Chaves Guzmán

     Durante el verano de 2043, aprovechando que los cerebros estaban quemados como consecuencia de la extrema canícula, desde el recién creado Ministerio de Asuntos Prohibidos se prohibió pensar. Lo que no resultó en modo alguno extraño, dada la capacidad intelectual de sus más altos funcionarios.

     No hubo el menor problema. Los súbditos del régimen global se habían ido acostumbrando a las excentricidades prohibicionistas y los pocos, muy pocos, dispuestos a poner en solfa las grotescas disposiciones del poder central no encontraron a nadie capacitado para mantener un debate dentro de las leyes de la ética y de la lógica.

     Además, bastante ocupados estaban en el Ministerio, con sus propios problemas, como para preocuparse de las reacciones de un puñado de histriónicos haraganes. Y es que tenían problemas, y de un inmenso calado.

     En primer lugar, debían definir el término “pensar”. Y no por un prurito intelectual que les llevase a conocer, sin lugar a dudas, a qué clase de capacidad o mecanismo se estaban refiriendo. Ni por un anhelo filosófico que les empujase hacia la equidad y la razón. Sino, simplemente, por aparentar que conocían la esencia del “pensar”. Y, puesto que la comisión encargada de hacerlo, perdida en disquisiciones metafísicas, no logró ponerse de acuerdo en discernir a qué aludía el “pensar”, el ministro de la materia decretó que tal cosa era, sin lugar a dudas, el desacuerdo con las decisiones del régimen de los globalizadores. Lo que no era ninguna tontería, pero sí una desfachatez.

     El otro gran problema consistía en averiguar, para aplicar las pertinentes medidas punitivas, quienes eran los que pensaban. Es preciso reconocer que, en este asunto, deshacer el nudo gordiano resultó más sencillo: puesto que los vigilantes de la seguridad pública, debido a su profesionalidad y experiencia, eran capaces de olfatear el crimen aún antes de ser cometido, el delito de pensar quedaba en manos de su intuición y pundonor.

Ciudad H7Q22
Enero de 2101

Publicado en Diario Lanza el 12 de Noviembre de 2012

lunes, 5 de noviembre de 2012

Miseria

CRÓNICA ONÍRICA DEL SIGLO XXI

                     Miseria
                                          Francisco Chaves Guzmán

     En 2042 se daban las condiciones para que el odio aflorase entre cada una de las puntadas del tejido social. Y el acoso de los que “no respiraban” sobre los que “parecían respirar” se extendió como una riada a todos los ámbitos de la vida.

     Tal cosa ocurrió con el beneplácito del Gobierno Global, desmintiendo así las campañas oficiales a favor del mutuo respeto y de la tolerancia. Pues, desde los medios de comunicación afines, se lanzaban despiadadas campañas en contra de todo lo que significase el más mínimo distanciamiento de las verdades de obligado seguimiento. Y los súbditos, cada vez más embrutecidos, entendieron que debían exteriorizar su desprecio ante todo lo que no compartiesen o no comprendiesen.

     Así fue cómo los boxeadores comenzaron a odiar a los albinos, los albinos a desdeñar a quienes utilizaban gayumbos, los que utilizaban gayumbos a zaherir a los que comían pipas, los que comían pipas a humillar a quienes tenían el pelo rizado, los que tenían el pelo rizado a menospreciar a los lectores de novelas, los lectores de novelas a vilipendiar a los paseantes solitarios, los paseantes solitarios a ofender a los jugadores de petanca, los jugadores de petanca a insultar a los que rellenaban crucigramas y los que rellenaban crucigramas a maltratar a los boxeadores. En un círculo infernal e interminable al que yo he puesto fin para no cansar al lector, que bien haría en imaginar los múltiples ejemplos que fácilmente podría añadir.

     Tal vez fuese oportuna una investigación sobre las motivaciones que el Gobierno Global, y sus esbirros, tenían para provocar tanto odio y tanta hostilidad. No es necesario. Desde la noche los tiempos se sabe que los dictadores siempre han buscado desviar la atención de los súbditos enfrentándolos entre sí, o señalando un chivo expiatorio. . . pues de esa manera olvidan quién es el culpable de su miseria. De su miseria económica y de su miseria intelectual.

Ciudad H7Q22
Enero de 2101

Publicado en Diario Lanza el 5 de Novirmbre de 2012